El feminismo como movimiento resurgió con fuerza en España tras la muerte del dictador Franco y no supuso para las mujeres una traba para incorporarse a las prácticas artísticas feministas que se estaban llevando a cabo en Estados Unidos bajo la premisa de “lo personal es político”, pues un protofeminismo, surgido desde la condición de la crítica de lo social y en paralelo a la dictadura franquista, ya se había gestado de la mano de artistas como Esther Boix, María Antonia Dans, Eulàlia Grau, Eugènia Balcells, Fina Miralles o Ana Peters.
Las promesas de libertad que trajo consigo la II República española quedaron perfectamente reflejadas en la obra de Maruja Mallo, Ángeles Santos y Remedios Varo. Estas mujeres desafiaron el imaginario conservador de su época a través de sus pinturas, subversión que posteriormente quedó apagada por la dictadura. El retraso del movimiento feminista, que a España llegó en 1975, no supuso para las mujeres artistas una traba para incorporarse a las prácticas artísticas feministas que se estaban llevando a cabo en Estados Unidos bajo la premisa de «lo personal es político». A pesar de que se carecía de una genealogía propia por cuestiones históricas obvias, desde España Fina Miralles y Eulàlia Grau, empapadas por la influencia anglosajona; Eugènia Balcells y Marisa González; así como por la influencia de Esther Ferrer, quien junto con Juan Hidalgo estableció vínculos con una red de performers extranjeros; supieron empoderarse a través de sus obras y presentar unos trabajos críticos en la línea con los movimientos de mujeres que desde finales de los años sesenta empezaron a surgir en España gracias al desarrollo económico del país. Esther Ferrer, Eugènia Balcells, Eulàlia Grau, Marisa González y Fina Miralles, supieron subvertir la imagen que el régimen había dado de las mujeres para levantarse con voz propia frente al patriarcado y la religión opresora que confinaba a todas las mujeres dentro de las cuatro paredes del hogar donde deberían ejercer de buenas madres y esposas.
El cuerpo fue un elemento artístico fundamental para todas ellas, un elemento aglutinador en sus trabajos artísticos con el que rechazaron el lenguaje voyeurístico que primaba para la estética machista y para el público que veía en el mismo un objeto de consumo. Para llevar a cabo su propósito se sirvieron de las técnicas artísticas consideradas menos machistas como las acciones corporales, la performance, el collage y la fotografía, a través de las cuales desafiaron todas las formas de mirar el cuerpo femenino, subvirtiendo su invisibilidad. Siguiendo este mismo camino, no será hasta los años noventa cuando emerjan una serie de artistas como María Ruido, Itziar Okáriz, Marina Núñez, Estíbaliz Sadaba o Ana y Carmen Navarrete, que desde el feminismo denuncian una cosificación del cuerpo de las mujeres. Si en los años setenta ya se empezó a hablar de la violencia ejercida contra las mujeres en la obra de Fina Miralles y en la de Marisa González, será otra vez en la década de los noventa cuando se retome la denuncia de la situación de violencia que viven las mujeres en la obra de Pilar Albarracín, mientras un sector de la ciudadanía española en 1992 se hallaba inmersa en los preparativos de las Olimpiadas y de la Expo de Sevilla. No será hasta finales de esta misma década, concretamente en 1997 y tras el feminicidio de Ana Orantes, cuando las feministas le exigirán al Estado español el cumplimiento de las convenciones internacionales en materia de derechos humanos. En el año 2000, artistas como Empar Cubells, Alicia Framis, o Lorena Amorós, y a través de la tecnología como herramienta del videoarte, generarán vínculos de sensibilización en la opinión pública, brindando una oportunidad única para desenmascarar la violencia contra las mujeres y desarticular los roles y los estereotipos de género.
Actualmente, en España podemos constatar una emergencia reciente de un conjunto de prácticas artísticas que, partiendo de un rechazo del binarismo sexual al abrigo de la teoría queer y de las aproximaciones esencialistas, proponen un uso imaginativo y provocador de la performance y las nuevas tecnologías, actuando como revulsivo frente a los discursos más domesticados del feminismo tradicional.
DURACIÓN
Ocho semanas – 100 horas.
PRÓXIMA EDICIÓN: Segunda semana de octubre de 2017.
OBJETIVO
Un recorrido hecho en paralelo a lo largo de la historia del movimiento feminista en España nos permitirá enlazar las obras de las artistas con los acontecimientos políticos más importantes: la II República y las libertades añoradas, el franquismo y la vuelta al hogar, así como la democracia y la situación en la que quedaron las mujeres tras ser decretado por la Constitución Española en 1978 el principio de igualdad ante la ley, sin discriminación de sexo, raza o religión.
METODOLOGÍA PEDAGÓGICA
Hay diversas formas de acercamiento a la realidad, de llegar al conocimiento a través de un itinerario de investigación. Las nuevas metodologías y epistemologías, entre ellas la feminista, exigen usos renovados de las técnicas convencionales de investigación ancladas en el punto de vista patriarcal, las mismas que por la manera en la que han sido aplicadas, han hecho difícil comprender la participación de las mujeres en la vida social, debido a la exclusión a la que se han visto sometidas[1].
El conocimiento de la realidad, las necesidades conscientes y los objetivos específicos marcados, vendrán otorgados a través de la elección de la metodología feminista, sustentada por la misma ideología feminista. Si partimos del hecho de que todo método de conocimiento está condicionado por una determinada visión del mundo, se puede afirmar que existe un modo particular de pensamiento que siguen las mujeres con “conciencia para sí”. Éste es el camino racional que recorren las mujeres como sujetos que estudian y sujetos estudiados, con conciencia política sobre la desigualdad femenina, cuyos conocimientos tienen como fin subvertir la considerada verdad absoluta trazada desde la perspectiva masculina, eliminar su condición de subordinadas, así como los obstáculos sociales, políticos, culturales y subjetivos que les impiden el ejercicio de sus libertades y el acceso pleno a la dignidad humana[2]. Esto significa que las vivencias opresivas, las desigualdades en torno a los seres humanos y la lucha por el derecho a ser diferentes, tienen un ámbito específico que debe ser estudiado y analizado dentro del feminismo. El sujeto de conocimiento a partir de ahora serán las mujeres, sus experiencias y sus observaciones, desligadas de la ideología sexista que no ha permitido que el género que las representa, tenga algo que decir y que ver a lo largo de los procesos históricos, y será a partir de la toma de conciencia de la situación opresora de las mujeres, la base para desarrollar una metodología y una teoría con la intención de llevar a cabo una práctica transformadora de toda relación de poder opresiva establecida por la ideología dominante.
El punto de vista feminista es el punto de arranque de este curso, el cual nos va a llevar al conocimiento de la realidad social, política, artística e histórica de la España contemporánea y es por ello por lo que será primado un análisis en el que se desarticularán las diversas disciplinas marcadas por su contenido falocéntrico y sexista. Por lo tanto, a partir de ahora se verán priorizados los esfuerzos de las artistas por romper con los discursos masculinos tradicionales, en deconstruir las imágenes de las mujeres transmitidas por artistas varones, así como en desarrollar las cuestiones de género que contribuirán a transformar la condición de inferioridad de las mujeres desde la base de su autonomía. La condición histórica de las mujeres ha venido marcada desde las determinaciones biológicas, sociales y culturales por lo que ha sido a través de sus obras cómo muchas de ellas han conseguido encontrar explicación a lo diferente y subvertir así la imagen típicamente binaria y pasiva transmitida por la cultura judeo-cristiana y por el patriarcado capitalista.
DIRIGIDO A
Este curso está dirigido a toda la comunidad universitaria y a todas las personas en general interesadas en el arte contemporáneo y en el arte realizado por mujeres analizado desde una perspectiva feminista.
PROGRAMA
Tema 1. El paréntesis liberador: las precursoras Marie Blanchard, Manuela Ballester, Maruja Mallo, Ángeles Santos y Remedios Varo.
Tema 2. Franquismo y protofeminismo: Esther Boix, Isabel Villar, Ana Peters, María Antonia Dans, Juana Francés, Esther Ferrer y Amelia Riera.
Tema 3. Acciones y reivindicaciones feministas durante la Transición: Fina Miralles, Eulàlia Grau, Patricia Gadea, Marisa González, Eugènia Balcells, Mari Chordà, Silvia Gubern, Àngels Ribé, Pilar Aymerich y Núria Pompeia.
Tema 4. Víctimas de un mal amor que mata: Marisa González, Pilar Albarracín, Cristina Lucas, Mau Monleón, Laura Torrado, Art al Quadrat, Esther Achaerandio, Sara Vilar, María José Cárceles, Pepa Espasa, Amalia Ortega, Empar Cubells y Alicia Framis.
Tema 5. Contra las imposiciones y los lastres patriarcales: Erreakzicoa-Reacción, Uqui Permuy, Eulàlia Valldosera, Carmen F. Sigler, Pilar Albarracín, Estíbaliz Sadaba, Yolanda Domínguez, Marina Núñez, Ana Gesto, María Marticorena, Itziar Okáriz, Lucía Egaña Rojas (Lucy Sombra), Diana J. Torres, María Llopis, Helena Cabello, Ana Carceller, Sandra Paula Fernández, Consuelo Chambó y Lucia Peiró.
COORDINA
Irene Ballester Buigues. Doctora en Historia del Arte por la Universitat de València y Máster Universitario en Investigación Aplicada en Estudios Feministas, de Género y Ciudadanía por la Universitat Jaume I de Castelló. Profesora y crítica de arte, es autora del ensayo El cuerpo abierto. Representaciones extremas de la mujer en el arte contemporáneo y directora en la Comunidad Valenciana del Festival Miradas de Mujeres. También coordina la sección de Arte de Feminicidio.net.
INSCRIPCIÓN
Para inscribirse en los cursos es necesario seguir los pasos de la plataforma de pago y efectuar el ingreso mediante tarjeta bancaria, Paypal o transferencia bancaria. En caso de duda, escríbenos a cursosonline@feminicidio.net.
COSTE DEL CURSO
Precio general: 150€.
Cuota reducida: 120€, aplicable a desempleados/as; estudiantes o grupos (dos o más personas de instituciones, asociaciones, empresas o colectivos); a quien haya participado anteriormente en alguno de nuestros cursos online; para quién se apunte 15 días antes de la fecha de inicio del curso.
Cuota de mecenas: 105 euros a nuestras y nuestros mecenas. Esta tarifa con 30% de descuento se aplicará de forma excepcional a quienes se inscriban antes del 14 de octubre de 2017.
Cuota beca/descuento: 60€. Para solicitar la beca es preciso escribir a cursosonline@feminicidio.net y ser aprobada la solicitud. Tendrán prioridad profesionales que trabajen en ámbitos vinculados a la prevención, sensibilización y tratamiento de la violencia machista; formadores/as y estudiantes de carreras universitarias vinculadas a la temática del curso; defensoras/es de derechos humanos y voluntarios y voluntarias de ONG.